La quiropráctica es una especialidad que se dedica a detectar, diagnosticar, corregir, prevenir y tratar las diversas alteraciones del sistema muscular y esquelético, especialmente la columna vertebral así como el sistema nervioso con tal de poder gozar de una salud óptima. Este tipo de medicina alternativa es completamente natural en la que no se emplean ni productos químicos, ni medicación, ni cirugía.
En España encontramos diversidad de centros que se dedican a tratar las diversas lesiones de esta especialidad, principalmente hay muchos quiroprácticos en Madrid.
Los problemas de espalda y de columna son uno de los más habituales en la sociedad, más del 90% experimenta problemas en algún momento de su vida y, dependiendo de la tipología y la gravedad, puede causar significativos daños en nuestra salud.
Esta disciplina, mediante manipulaciones articulares, trata diversas lesiones como: lumbalgia, ciáticas, hernias discales, esguinces cervicales, hiperactividad, escoliosis, asma, cefaleas, náuseas, artrosis, osteoporosis, trastornos digestivos, depresiones, fibromialgia, contracturas musculares, insomnio, dolores menstruales, presión alta, otitis…
La quiropráctica se basa en el estudio del propio cuerpo y organismo con la intención de conocerlo en profundidad y tratar con diversas terapias manuales varias lesiones. En Estados Unidos es una de las disciplinas más demandadas dentro del mundo sanitario.
Esta profesión nació en el 1895 por Daniel David Palmer que analizó y estudió la columna de un paciente devolviéndole la funcionalidad. A partir de ese momento se iniciaron investigaciones originando esta disciplina. La aplicación de la quiropráctica en el mundo es bastante compleja.
La OMS (Organización Mundial de la Salud) reconoce esta profesión y aplaude los efectos de este tipo de tratamiento en la salud de los pacientes. Sin embargo, hay países en los que no está regulada esta profesión o no existe una legislación específica y clara de su práctica. El Parlamento Europeo reconoció esta profesión que está en total desarrollo y expansión.
En España, lamentablemente, la regularidad de esta profesión no está integrada en el sistema sanitario. La Asociación Española de Quiropráctica (AEQ) lleva años luchando con tal de formalizar esta disciplina y contribuir en su práctica.
Tienen el objetivo de crear una titulación universitaria que se dedique a formar a profesionales en quiropráctica con tal de evitar que las personas que deseen especializarse en esta disciplina lo puedan hacer sin tener que desplazarse del propio país. La quiropráctica se basa en el estudio de nuestro organismo con tal de dar respuesta a las lesiones y necesidades para su correcto funcionamiento. Una práctica natural que prescinde de fármacos y de cirugía que está ganando bastante terreno gracias a los excelentes resultados que ofrece.
La diversidad de condiciones que establece y postula cada país ofrece una falta de homogeneidad en cuanto a esta profesión, tan solo el tiempo será quien dicte lo que ocurrirá en nuestro país con esta disciplina que tiene el apoyo de la OMS, el Parlamento Europeo, científicos, facultativos médicos, etc. Integrar el servicio quiropráctico en España es, a día de hoy, una tarea muy complicada. La quiropráctica es, por tanto, una alternativa natural que trata multitud de dolencias de nuestro organismo.