Aunque la salud ocular es algo que debe preocuparnos todo el año, es cierto que en verano se dan determinadas condiciones que dañan nuestros ojos de manera irreparable. En la mayoría de los casos las consecuencias son tardías y las enfermedades asociadas al órgano de la visión se desarrollan con el tiempo, por lo que es común que no les prestemos la suficiente atención.
Sin embargo, cada vez son más los expertos que señalan los riesgos de no cuidar adecuadamente nuestra visión, por lo que vamos a ofrecerte tres consejos para evitar que este verano, y el resto del año, tus ojos sufran. Estos son algunos de los consejos que nos indican desde http://www.gafanet.com.
- Cuida tu alimentación
Mantener una dieta equilibrada no sólo te ayudará a mantener un buen estado de salud general, sino que además contribuirá a mejorar tu salud ocular. Por un lado, enfermedades relacionadas con la mala alimentación y la vida sedentaria, como sobrepeso, colesterol e hipertensión, están relacionadas con un mayor riesgo de cataratas tempranas o degeneración macular asociada a la edad.
Por otro lado, una alimentación rica en determinados nutrientes te ayudará a mantener la buena salud ocular. Antioxidantes, Ácidos grasos Omega 3 o DHA, betacaroteno, luteína y vitaminas A, C y E son esenciales para mejorar la visión y la percepción de colores a largo plazo.
Este verano añade a tu dieta diaria pescados azules como el salmón, la sardina o el atún, ricos en Omega 3. Además, opta por frutas y verduras de color rojo intenso o naranja, como las zanahorias y las naranjas, ricas en betacarotenos que el cuerpo transformará en vitamina A; y por frutas y verduras de color verde intenso y amarillo oscuro, como la familia de las coles (brócoli, coles de bruselas, etc.), con alto contenido en vitamina C.
Si deseas más información sobre cómo la alimentación puede cuidar tu visión lee este artículo.
- Los riesgos de exponer los ojos al sol sin protección
En verano, con el aumento de la claridad, es muy común utilizar gafas de sol para proteger nuestros ojos y, a la vez, mejorar nuestra visión. Sin embargo, no todas las gafas de sol valen y actualmente un tercio de las gafas de sol comercializadas no están debidamente homologadas.
El uso de gafas de sol no homologadas es más perjudicial que no utilizar este complemento, por lo que evita su compra en bazares o mercadillos, que no ofrecen las garantías necesarias. Cuidado también la compra de este producto por internet. Este verano muchas tiendas online han apostado por ofrecer gafas de moda a precios realmente competitivos sin ofrecer las garantías suficientes. Elige ópticas online que trabajen con gafas de calidad, como Gafanet.com.
A la hora de elegir tus gafas de sol, además de la opacidad de la lente (que permitirá que pase más o menos claridad) vigila el índice de protección de los rayos ultravioleta. Un filtro 100% protector lo podemos encontrar en numerosos modelos y, además de evitarnos dolencias comunes, como dolor de cabeza, mareos y malestar, también evitarán lesiones más graves como cataratas, conjuntivitis o inflamación de córnea.
- Uso de gotas humectantes y lágrimas artificiales
En la época estival también es muy común que nuestros ojos se resequen, dificultando la visión y generando molestias para quien lo sufre. El calor, la sequedad, el cloro de piscinas y el agua salada del mar, el uso prolongado de lentillas o incluso los viajes en avión son los principales causantes de estas molestias. El uso de lágrimas artificiales nos evitará la sensación de sequedad, mejorando la humectación natural del ojo.
